Margaret Thatcher tenía razón.
Ya no hay sociedad.
Lo que hay…
es una élite de seguridad transnacional…
que se está repartiendo el mundo…
usando el dinero de vuestros impuestos.
Debemos protegernos contra…
la adquisición de influencia sin garantías,
por parte del Complejo Militar-Industrial.
El peligro de un desastroso aumento
de poder fuera de lugar existe.
Y persistirá.
Nunca debemos permitir que el peso
de esta combinación…
ponga en peligro nuestras libertades
o procesos democráticos.
En las democracias o…
las pseudodemocracias
hacia las que estamos evolucionando…
Las guerras son el resultado de mentiras.
La misma palabra “secreto” es repugnante
en una sociedad libre y abierta.
Decidimos hace ya mucho tiempo…
que los peligros del encubrimiento
excesivo e sin garantías…
de hechos pertinentes…
superan con creces los peligros,
que se usan para justificarlo.
El compromiso de mi tío con la paz…
dio frutos en el tratado de prohibición
limitada de ensayos de agosto de 1963.
Pero su asesinato en noviembre,
hizo que la nación tomara otro camino.
Sus sucesores han lanzado
una guerra tras otra.
Es decir, el objetivo es tener una
guerra sin fin, no una guerra exitosa.
Librando guerras interminables
en el extranjero.
Muy pronto, dentro de
unos años se convertirá en…
lo “normal” que haya una
guerra constante en Occidente.
Las personas alcanzarán la madurez
y la edad adulta bajo el entendimiento…
que siempre hay una guerra.
La guerra se convertirá
en la “nueva normalidad”.
Porque en todo el mundo nos enfrentamos
a una conspiración compacta y despiadada.
Para combatir esa élite…
no debemos hacer peticiones…
debemos hacernos cargo de ello.
Estoy hablando aquí hoy para tomar
un camino radicalmente diferente,
un camino hacia la paz.
Hemos estado inmersos en
un discurso de política exterior…
que solo habla de adversarios, amenazas,
aliados, enemigos y dominación.
Nos hemos vuelto adictos a las narrativas del
bien contra el mal de los cómics [y Hollywood].
Todo se convierte en una guerra.
La guerra contra las drogas,
la guerra contra el terrorismo…
la guerra contra el cáncer,
la guerra contra el cambio climático.
Eso es:
la guerra a través de los medios.
Esta forma de pensar nos predispone a
librar guerras interminables en el extranjero.
Guerras y golpes de estado y bombas…
y drones y operaciones
de cambio de régimen.
¿Quiénes son los criminales de guerra?
No son solo los líderes.
No son solo los soldados.
Son los periodistas..
Los periodistas son criminales de guerra.
Debemos preguntarnos
¿es esto realmente lo que somos?
¿Es esto lo que queremos ser?
Porque esta guerra eterna, que ha drenado
tanto la vitalidad de nuestra nación…
ahora amenaza con hundir al mundo…
al horror indescriptible
del Armagedón nuclear.
Si las guerras pueden iniciarse
con las mentiras…
la paz puede iniciarse
con la verdad.
El Presidente Kennedy
entendió que la paz comienza…
con nuestras actitudes
y creencias básicas.
Habló de la inutilidad…
de esperar pasivamente a
que la otra parte se ilumine.
Deberíamos, dijo, empezar
por mirar hacia dentro.
Cuando mantenemos a los demás en la creencia,
de que inevitablemente son enemigos…
tienden a moldearse de acuerdo
con nuestra visión de ellos.
Es una profecía o
predicción autocumplida,
que lanza a todos los jugadores a un ciclo
de sospecha contra el cual mi tío advirtió.
Al asumir el papel de enemigo,
empoderamos a los intransigentes…
en lugares como
Rusia, China, Cuba e Irán.
Los invitamos al drama del conflicto…
al drama de la provocación
y la contraprovocación,
de arma y contraarma.
En aquel entonces nos desviamos hacia
el camino del complejo militar-industrial,
sobre lo cual el presidente Eisenhower advirtió
en el mejor discurso que jamás haya pronunciado…
y uno de los más importantes de
la historia, donde advirtió a América:
que si no hacemos todo el esfuerzo
para evitarlo…
el emergente complejo militar-industrial
devoraría nuestra democracia.
Mi tío lo sabía.
Pasó tres años luchando contra el
ascenso del complejo militar-industrial.
Después de su muerte, recorrimos
ese camino que predijo Eisenhower.
Y ahí es donde nos encontramos
hoy y es hora de revertirlo.
Es hora.
Existe un peligro muy grave…
que una anunciada necesidad
por mayor seguridad…
será aprovechado por aquellos,
ansiosos por ampliar su significado…
hasta los límites mismos de la
censura y el ocultamiento oficiales.
Wikileaks es un servicio de
inteligencia hostil no estatal.
Julian Assange.
– un terrorista de alta tecnología
– un traidor, doble traidor
Tiene que responder por lo que ha hecho.
Assange se enfrenta
a 175 años de prisión…
por publicar documentos clasificados que exponen los
crímenes de guerra estadounidenses en Irak y Afganistán.
Los periodistas son criminales de geurra.
No estoy pidiendo a sus periódicos,
de apoyar a la administración…
pero sì les pido ayuda
en la tremenda tarea…
de informar y alertar
al pueblo americano.
Porque tengo plena confianza…
en la respuesta y dedicación
de nuestros ciudadanos…
siempre que sean plenamente informados.
Y es por eso que nuestra prensa estaba
protegida por la Primera Enmienda,
el único gremio en Estados Unidos
específicamente protegido por la Constitución.
Está detenido desde el
7 de diciembre de 2010…
de una forma u otra.
¡Julian Assange es un héroe!
Wikileaks ha realizado este
extraordinario servicio público.
Esto es un intento, no de quebrarlo,
sino de matarlo.
Es un asesinato lento.
Todos sabéis que Julian Assange
es un denunciante heroico.
Defendió la democracia.
Se opuso al estado de vigilancia.
Se opuso a la corrupción gubernamental.
Luchó por todas nuestras libertades.
Y hizo el tremendo sacrificio…
por el que ahora está encarcelado
y enfrenta cadena perpetua…
y la extradición a Estados Unidos.
Julian Assange está muriendo
por tu derecho de saber…
lo que tu gobierno está haciendo
en tu nombre, por tus espaldas.
La urgencia de perdonarlo
no puede esperar.
No puede esperar hasta que
yo sea presidente.
Necesitamos hacerlo ahora.
Por favor firma la petición…
instando al presidente Biden a indultar
inmediatamente a Julian Assange.
Muchas gracias a todos.
[con ♥ Agenda2029.is]